Manuel Lois 2º Parte

En el año 1.970, se habla de ampliar la Residencia, para ello el primer paso que hay que dar es hacer un nuevo edificio donde irá ubicado el ambulatorio, el ambulatorio “Virgen de la Cinta”, hoy “Centro periférico de especialidades del hospital Juan Ramón Jiménez”. Este ambulatorio ya estaba diseñado y el día 8 de enero se había publicado el concurso subasta para su construcción. La ampliación de la residencia consistiría en la construcción de dos nuevos edificios adosados al primitivo, donde se emplazarían Pediatría y Ginecología-Obstetricia. Y mejoras y algunas transformaciones en general, en el antiguo edificio par dar una mejor asistencia. (Odiel 09/01/70).

En los años 80 se le agrego al hospital dos nuevos edificios, por una parte el almacén general del hospital, junto a urgencias, y por otra el archivo de historias clínicas hoy cochera de las ambulancias del 061. De esta forma quedó configurado “El Manuel Lois” hasta su cierre en diciembre de 1.993.




En lugar del Manuel Lois


Desmintiendo la noticia que ha venido propagándose en los últimos meses, cuando termine de demolerse el antiguo hospital ‘Manuel Lois’, no será un asilo el edificio que reemplace al veterano; sino un instituto de enseñanza de Secundaria y Bachillerato, que se llamará ‘Didonuba’.

A dicho instituto irán alumnos provenientes de todos los colegios (públicos y privados) así como de institutos de Huelva capital; alumnos que serán apartados por la Delegación de Educación para un rendimiento escolar más satisfactorio. La propia Delegación, apoyada sobre el arbitrio de directores y psicólogos de cada centro, extraerá a alumnos conflictivos no por las bajas calificaciones y el consabido fracaso escolar; sino por los problemas ocasionados en el desarrollo normal de las clases. En esta consideración figuran aquellos alumnos que se ausentan frecuentemente a espaldas de sus padres, los que interrumpen las explicaciones con burlas, los que agreden a sus compañeros y los que agreden a sus profesores El nuevo edificio constará de veinticuatro aulas y cuatro plantas. En la primera estarán los que hacen novillos, en la segunda los que interrumpen; para la tercera, los que agreden a sus compañeros y para la cuarta, los que agreden a sus profesores. Hay calculado un aforo de setecientos veinte alumnos, que se distribuirán equitativamente en cada aula.

Justo Hidalgo, asesor de Redinamizaciones educativas de la Junta de Andalucía, al hilo de anunciarse el novísimo emplazamiento, ha expresado su satisfacción ante un hecho que durante tantos cursos viene siendo el quebradero de cabeza de profesores, padres y alumnos. Muchos ciudadanos que están inmersos en una conflictividad tan frecuente de estos tiempos aguardan pacientes la primera piedra de una iniciativa que promete. Carmen Rodríguez, presidenta de la asociación ‘Bieneduca’, comenta: “¡Por fin la oficialidad actúa debidamente ante una de las problemáticas que afectan a nuestra sociedad! Estas decisiones vienen a alegrar sobre todo a los más responsables de la Enseñanza”.

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